16 de mayo de 2012

Capítulo 47: Todo se termina.


Narra Evelyn:

Estaba sentada sobre la silla, y mis manos fuertemente amarradas por detrás con una soga. A la par mío se encontraba Nicholas, en el mismo estado, pero todo era aún más desesperante. Mis ojos derrochaban sin cesar una lágrima tras otra, no podía detenerme, pues nunca había estado tan asustada y alterada al mismo tiempo. No atentaban contra mi vida, pero si contra la del hombre que más amaba. Y lo peor era que sentía que yo no podía hacer nada para evitarlo. La aguja que poseía Carl estaba rozando con sufrimiento la piel de Nicholas. Todavía no había sido introducida, pero estaba a punto de serlo. Él ni siquiera miraba eso. Continuaba mirando mi rostro, mantuvimos el contacto visual todo el tiempo. Hasta noté que respiraba un poco agitado, pero con normalidad, como si mis ojos, lo calmaran un poco.

 En un instante observe que Carl estaba muy cerca de implantar aquella sustancia en el cuerpo de mi chico, y creo que una fuerza, que provenía de mi inconsciente, se apodero de mi anatomía. Y como mis piernas eran las únicas partes de mi cuerpo que podía usar en aquel momento, las utilice para terminar con toda la situación. Golpee justo el brazo de aquel sujeto, produciendo que la jeringa que tenía en su mano, cayera al piso destruyéndose por completo.

-Lo hice. – Pensé dándome un cumplido a mí misma.  Mientras notaba como todos en la sala habían quedado estupefactos ante mis actos, hasta el mismísimo Nicholas que me miraba boquiabierto. Definí a ese momento como el tiempo más tenso de toda mi vida. El nerviosismo que cause en todos fue irremediable. Aquellas personas que se destacaban por la maldad, se hayan helados, no podían reaccionar ante semejante acto. Me miraban con bronca, con irá. Sabía que era el instante de abstenerme a las consecuencias y soportarlas. Pero bueno, lo había salvado a él, eso era lo único que me importaba.
-¿Quién diablos crees que eres para hacer lo que acabas de hacer? – Pregunto uno de ellos con demasiada seriedad, percibí que estaba muy enfadado.

-Tú no eres Dios para decidir sobre la vida de una persona. No tienes el derecho de terminar con la vida de nadie. -  Respondí con astucia. Por primera vez había liberado mis pensamientos, por primera vez el temor había desaparecido por unos minutos.

-El idiota de tu novio si lo merece. – Insistió.

-No, están muy equivocados. Ustedes son lo que no tienen claro cómo funcionan las cosas. Todo se puede arreglar con más tranquilidad, y sin causar todo esto. Y algún día van a pagar todo el daño que hicieron, absolutamente todo. -  Reproche con sinceridad, y cansada de todos los ataques que habíamos recibido.

-Sí, claro, tienes razón. – Respondió con sarcasmo. – Mejor opta por cerrar la boca y quedarte callada si no quieres que te matemos primero a ti. – Me amenazo.

-Haz lo que quieras, soy mucho más fuerte que ti. Tengo el poder de solucionar las cosas como debe ser, y no rebajarme a las peores maneras, o sea, las que ustedes están usando.  – Continúe revelándome.

-¿Acabas de decir que yo soy más débil que tú? – Exclamo lanzando una fuerte carcajada.

-Lo que escuchaste. – Conteste con seguridad.

-¿Quieres que te demuestre lo fuerte que puedo ser? Sí, te mostraré que tú eres una barata mujer, débil como todas. – Pronuncio acercando cada vez más hacia mí.

-¿Vas a golpearme? – Cuestione. –Veo que nunca podrás comprender de lo que estoy hablando. – Acoté con coraje.  Pero antes de que Carl pudiera hacerme cualquier tipo de daños, Nicholas se levantó como un relámpago, y lo empujo alejándolo de mí. Claro, mientras Carl y yo discutíamos, Nick aprovecho y busco la manera para desatarse las cuerdas, y mágicamente lo logro. Y mientras el sujeto se estabilizaba, mi novio se tomó el tiempo para liberar mis manos.

- Vamos Carl, si quieres pelear, peleemos así. Estamos en las mismas condiciones, esto es lo justo. – Menciono enfrentándose con valentía. A todo esto, Carl se había tornado completamente desconcertado. 

Las personas que estaban a su alrededor, tampoco hacían más nada. Nunca antes nos habíamos revelado de esa manera. Por un instante nadie hablaba, nadie decía una palabra. Hasta que se abrió la puerta principal.

-¡Policía de New York! ¡Manos arriba! – Grito uno de ellos. Creo que eran como seis personas, y detrás de ellos pudimos ver que estaban Joe, Kevin, y Derek. Mi amigo estaba completamente exasperado. De inmediato los uniformados se dieron cuenta quienes eran aquellas personas que debían llevarse, y a nosotros nos dejaron en paz. Nick me tomo de la mano, y salimos hacia afuera, finalmente pudimos liberarnos de toda la situación. Nos paramos uno frente al otro. Me miro a los ojos con todo el amor que pudiese existir dentro de él.

-Te amo, te amo con todo mi corazón. – Dijo en voz alta abrazándome con todas sus fuerzas.

-Yo también, yo también te amo. – Pronuncie. Luego me despegue un poco de él y lo mire con una sonrisa. 

-¿Se terminó todo, no? – Pregunté esperanzadora.

- Te prometo… te juro que desde hoy, todo va a ser completamente diferente. Vamos a ser muy felices, esta vez, nada lo arruinará. – Prometió con muchísima seguridad, pues lo que tanto nos estorbaban, finalmente se encontraban en manos de la justicia.

De pronto vimos pasarlos a ellos, a esos sujetos. Los tres hermanos venían en una de ellas, que era conducida por un policía. Y en la otra, venían los demás matones. Vi a Carl mirar hacia el piso. Apenas nos observó de reojos, haciéndonos saber que nosotros habíamos ganado por primera vez. Y sentí lastima. 
Sentí compasión, piedad por ellos. Muchas veces es imposible creer que una persona que aparenta ser normal, lleve tanta malicia, perversidad, y tantas ganas de hacer daño a la gente.  Es completamente increíble que existan. Y es decepcionante cuando uno comprende que ellos están dispuestos a cruzar cualquier límite, sin pensar en nada más que en su bienestar, y nunca en el de los demás.

-Siento tristeza por ellos. – Exprese mirándolo a Nick.

- No pienses más. Fueron solo algo malo de tu vida, olvídalos. Van a tener lo que merecen. – Dijo cálido, y luego beso mi frente con ternura. Acto seguido salude a los chicos, y le di un fuerte abrazo a Derek, que estaba demasiado preocupado pero se tranquilizó al verme bien.

Narra Nick:

No puedo describir el alivio que se apodero de mí cuando entro la policía en aquel momento, y aún más  cuando vi se los llevaron. No podía esperar a regresar otra vez a mi vida de siempre. A volver a cantar en escenarios, y hacer lo que más me gusta. Pero lo que más ansió es regresar con ella, a volver a ser como lo éramos antes.  Con toda esta nueva tranquilidad, podríamos salir juntos de la mano, decirle al mundo cuanto nos queremos, y que puedan verme como realmente soy, sin ocultar más nada. Este increíble día, marcó un antes y un después en toda mi vida. Y desde aquel día juré que la amaría por siempre, que solo me dedicaría a hacerla feliz, a devolverle todo lo que ella me dio, y mucho más. A hacerla la mujer más feliz del mundo… a despertarme y poder verla a mi lado, con una sonrisa.

Nos subimos a una camioneta, que afortunadamente nos llevaría de regreso a New York, a nuestras casas.

-¿En qué piensas? – Pregunto ella que se encontraba sentada a mi lado.

-En que ahora vamos a poder hacer y tener todo lo que siempre soñamos, juntos. – Dije alentador y ella sonrió con felicidad.

-¿Y qué es lo que tu tanto sueñas? – Cuestione nuevamente.

-Quiero que… caminemos de la mano juntos. Que todo el mundo sepa cuánto te amo. Que también 
podamos hacer música juntos, y que algún día en un futuro… nos casemos y formemos una hermosa familia, y viajemos por el mundo, y seamos felices, solo eso. – Propuse con gran entusiasmo y amor. - ¿Por qué me miras tan sorprendida? – Pregunté con picardía.

-Mi amor, sabía que eras todo un soñador, pero no imaginaba que habías soñado todo una vida junto a mí. – Dijo con dulzura.

-Entonces… ¿Qué piensas? ¿Tú estás dispuesta a estar siempre conmigo? – Cuestione con cariño acercándome más a ella.

-Claro que sí, estoy dispuesta a todo lo que sueñas, y a mucho más si es necesario. – Respondió. De pronto rozamos nuestros labios, y nos unimos en un beso, un beso que jamás olvidaríamos, porque marco el comienzo de una vida feliz, y lo más importante… una vida juntos. 

[Hola chicas, acá les dejo el capítulo 47... uno de los últimos, la novela esta punto de llegar a su final. Espero que les guste, si? En muy poco tiempo voy a estar subiendo otro capítulo más! Las quiero. ] 

5 comentarios:

  1. WOHOO!!! Por fin los tienen y van a poder estar juntos, que hermosooo<3
    Me encanta tu nove, no quisiera que se acabará :( pero cuando esta termine no dejes de escribir :)

    @CindyJonatica1D

    ResponderEliminar
  2. WIII sigue

    @JoBrsMuchBetter

    ResponderEliminar
  3. Esa Evi es una GENIA, weón, la admiro :')
    ¿Ya se acaba? ¿como? wtf? NO!, Si ya terminas esta, nena, tienes que hacer otra, eh? :3
    I lOVE YOU.♥

    ResponderEliminar
  4. Me encanto! Siguela pronto :)
    @MyWorldJoBros

    ResponderEliminar
  5. wohoooooooooooooooooooooo :') estoy como llorando alfin termino todo y van a poder ser felices :') mas encima nick es todo un amoooooooooooooooor hahaha

    @feeeerjb

    ResponderEliminar